domingo, 2 de septiembre de 2007

Insomnio

Es después de la una de la mañana cuando la soledad viaja libremente,
Se acurruca en una taza o se transpira en una loción exquisita,
Es después del himno nacional cuando se libera el descuido,
Los recuerdos efervecen y brota el maldito desdén de los olvidos.

Es por eso que la gente duerme antes de las doce,
Es por ello que la gente moldea el mito de que en la madrugada
Se liberan los malos espíritus, aquellos que estremecen,
Aquellos que pueden volverte completamente loco.

No mintamos, todos sabemos que a lo que en verdad tememos,
Es a la presencia de la soledad en la mente, en el corazón,
En las manos o en los brazos,
En alguna espalda o en los labios.

Es verdad, todos lo sabemos,
Sabemos que el ser humano tiembla, se azora
Se aterra y amedrenta cuando a solas queda frente
A la inmortal y crecida soledad…

No hay comentarios: